Crecí rodeada de libros. Recuerdo haber tenido un enorme libro que poseía 365 cuentos de animales, donde cada cuento era para cada día. También tuve una caja llena de clásicos de la literatura infantil: Ahí tenía un tomo de La sirenita, El traje del emperador y uno que captó mi atención sin saber por qué: Los cisnes salvajes. Este último título, de Hans Christian Andersen, trata sobre once príncipes que fueron convertidos en cisnes por su madrastra y que la única persona que podía romper la maldición era su hermana, quién tenía que tejer camisas de ortigas para ellos mientras mantenía un voto de silencio.
La historia captó mi atención tanto por el sacrificio de la princesa, que debía tejer para salvar a quienes amaba, como por los humanos que se transformaban en cisnes. Así que cuando supe que Elizabeth Lim, autora de ascendencia japonesa, escribió un libro inspirado en este cuento de hadas, es que quise leerlo.
Seis grullas es el nombre que Elizabeth Lim le dio a su retelling de Los cisnes salvajes. Nos presenta a Shiori’anma, la princesa de Kiata, cuyos poderes mágicos aparecen cuando ella da vida a una pequeña grulla de papel, Kiki, huye de su ceremonia de compromiso y termina conociendo a un particular dragón. Si bien esta manifestación de poder pasó desapercibida en el reino (donde esta prohibida la magia), es su madrastra, Raikama, quien nota que algo está distinto en Shiori.
Al mismo tiempo, Shiori sospecha de su madrastra. Cuando descubre que Raikama es una poderosa hechicera, ésta convierte a los hermanos de Shiori en grullas, destierra a Shiori de su hogar y le advierte que no debe decir nada: por cada palabra que salga de sus labios, uno de sus hermanos morirá.
Sin voz y sola, Shiori emprende la búsqueda de sus hermanos y descubre una oscura conspiración para hacerse con el trono de Kiata. Solo Shiori puede salvar el reino, pero antes debe confiar en su ingenio, la grulla de papel a la que dio vida, al intrepido dragón que conoció en el río y al prometido que rechazó hace un tiempo.
Seis grullas toma una historia ya contada —como la mayoría de todas las historias en la humanidad—, para adaptarla en una diáspora que la autora conoce: la mitología asiática, o, más bien, ciertos elementos de la mitología asiática que los traslada en su novela de fantasía. De todos modos, la mayoría de las historias de fantasía que hemos leído se basan en otras mitologías y acontecimientos históricos (Puedes notarlo en la saga de Harry Potter, Canción de Hielo y Fuego y, obviamente, con los libros de Tolkien). El resultado en este libro es bastante bueno pues tienes una construcción de mundo sólida, con magia y con personajes con los que ya te encariñas y quieres saber más de ellos.
¿Qué otra cosa puedo agregar? Pues que al adaptar el cuento de hadas de Andersen esperarás que termine de igual manera, pero no es así. Elizabeth Lim da un giro a los arquetipos de cuentos y eso lo demuestra con sus personajes. Sobre todo con el rol de la madrastra que desarrolla en esta novela y la relación que tiene con la protagonista.
El final del libro es satisfactorio y sólo me hace desear leer la continuación, que lleva por nombre La promesa del dragón y espero que llegue al castellano muy pronto. Por otro lado, le agarré un particular gustito a las novelas con diáspora asiática así que tengo deseos de leer novelas como La hija de la diosa de la luna de Sue Lynn Tan y La chica que se entregó al mar de Axie Oh. Ojalá pudiera leerlos apenas estén disponibles en Chile.
Y bueno, si te gustan las hitorias de fantasía, una nueva fprma de contar un viejo cuento de hadas, magia, aventuras, crecimiento de personajes y relaciones familiares junto a algo de la mitología asiática pues este libro es para ti.
Seis grullas de Elizabeth Lim está disponible en todas las librerías gracias a Editorial Planeta Chile.